El Centro Deportivo Municipal Cuatro Caminos aspira a ser un referente de edificio público para la ciudad de Madrid. Ofrecerá unos servicios modernos y eficientes, comprometidos con el medio ambiente, concebido como una prolongación del espacio urbano. Está situado en el popular barrio de Tetuán, en una agradable plaza peatonal. Su volumen es rotundo pero sencillo, abierto y amigable, alejado de la imagen típica de gimnasio cerrado y ensimismado. Son varias las actuaciones sensibles a su entorno como la introducción de un patio hacia la medianera que permite ventilar e iluminar de forma natural o el porche sur que invita a entrar al amplio vestíbulo hacia las escaleras que discurren por la fachada, de manera que es fácil orientarse mirando a la plaza. El edificio es un gran contenedor que aprovecha el máximo del volumen y superficie. Se requieren pocos espacios, pero amplios, proporcionados, generosos en altura y bien iluminados, que permitan un uso flexible. La estructura de grandes luces tiene un gran protagonismo y expresa su propia cualidad espacial y estética, a través de vigas prefabricadas y prelosas de hormigón en las plantas inferiores, que se transforman en cerchas y madera CLT en las circulaciones y salas, quedando siempre vistas. Se utilizan sistemas innovadores, industrializados con criterios de utilidad y eficiencia. Destaca el sistema de capas de la fachada de vidrio, con vegetación que crecerá trepando por cables y toldos domotizados, que será un fondo natural cambiante hacia la plaza. El edificio es modélico en términos de ahorro energético: optimización de la luz natural, instalaciones de alto rendimiento, minimización del consumo de agua y reciclado de aguas grises, aprovechamiento de la energía solar o el empleo de materiales reciclados y fáciles de reciclar: un Edificio de Consumo Casi Nulo, NZEB.