Gelato Collection es una innovadora propuesta de alta heladería que fusiona el arte culinario con la sofisticación del mundo de los perfumes. Concebida por el renombrado chef Albert Adrià, galardonado como World’s 2nd Best Chef en 2024 y World's Best Pastry Chef en 2015, esta experiencia redefine el concepto tradicional de las heladerías. Inspirándose en la tradición de los perfumistas de numerar sus creaciones, Gelato Collection se plantea como un banco de recetas únicas y numeradas que evolucionará con el tiempo, transformándose en una colección exclusiva de sabores cuidadosamente elaborados.Para materializar este ambicioso proyecto, Albert Adrià confía en El Equipo Creativo, con quien ya había colaborado en proyectos tan destacados como los restaurantes Tickets, La Dolça y Pakta. Juntos han diseñado un espacio que combina contrastes: frío y cálido, sofisticado y minimalista. El objetivo principal es transportar al visitante al universo de las perfumerías y joyerías, dejando atrás la estética convencional de las heladerías. En este entorno, los helados se convierten en el eje central, auténticas joyas que celebran la excelencia culinaria.Concepto y DiseñoEl interior de Gelato Collection es un espacio elegante y minimalista, donde cada elemento contribuye a una experiencia sensorial única. En el corazón del espacio se encuentra la vitrina de helados, concebida como el verdadero protagonista. Su diseño, revestido con vidrios acanalados, transmite frescura y una sensación casi helada, destacando los vibrantes colores de la colección creada por Adrià.Este núcleo frío contrasta armoniosamente con las paredes de tonos metalizados y achampanados, que evocan lujo y sofisticación, a la vez que generan un sutil movimiento. La vitrina, con su apariencia de un regalo cuidadosamente envuelto, recuerda a los frascos de perfume o las delicadas cajas de joyería, realzando el valor de cada helado como una pieza única y exquisita.En la entrada, el espacio a doble altura está coronado por tres grandes lámparas hexagonales de vidrio texturizado, cuya luz fría evoca la pureza del hielo. Estas lámparas flotan etéreas, creando una atmósfera mágica que invita a los transeúntes de La Rambla a explorar el interior. El diseño, pensado para ofrecer refugio del cálido clima de Barcelona, promete refrescar tanto el cuerpo como los sentidos.